Con dos años de rezago, la Secretaría de Energía finalmente divulgó los datos sobre las reservas (comprobadas, probables y posibles) y los recursos de hidrocarburos en todas las cuencas del país correspondientes al 2012. En momentos en que la estatizada YPF y la Argentina necesitan de capitales estratégicos para recuperar el autoabastecimiento energético, la cartera que conduce Daniel Cameron reconoció una fuerte caída de un 5% en las reservas comprobadas (que son las que el mercado y los inversores tienen en cuenta) tanto de petróleo como de gas respecto a las cifras registradas en 2011.
El Gobierno reveló una verdad que el sector ya descontaba pero a la que llamativamente, y por razones no explicitadas, no podía acceder en los registros públicos, luego de que en 2011 el organismo oficial dejara de publicar esta información de manera sorpresiva.
Los datos se dieron a conocer después de que El Cronista publicara en su edición del 24 de febrero el reclamo de ocho ex secretarios de Energía, que elevaron un pedido formal a Cameron por el que le solicitaban estas cifras y expresaban su preocupación ante la falta de datos. Han pasado ya 26 meses desde diciembre de 2011, lapso más que suficiente para que los organismos técnicos de su dependencia hayan procesado debidamente la información sobre reservas probadas, probables y recursos, tanto de petróleo como de gas, advertía la carta. Los ex funcionarios nunca obtuvieron respuesta de la cartera energética.
La caída no sorprende al mercado. Las reservas de petróleo y sobre todo de gas vienen desplomándose desde que el kirchnerismo asumió en el poder. Sin embargo, los números de 2012 muestran que la merma en las reservas de crudo se profundizó: bajaron un 5% interanual, totalizando en 374.289 M metros cúbicos. El año anterior la baja había sido de 1,9%. Desde el 2002 marca un descenso de casi el 20%. En cuanto a la reservas de gas natural, el año pasado terminaron en 315.508 MM de metros cúbicos, con un retroceso interanual de 5,1%. En los últimos 10 años acumularon una drástica caída de más del 50%. Los datos poco alentadores se dieron durante el primer año del Estado al frente de YPF y si bien se revirtió algo la baja en gas (en 2011 fue del 7,3%), en petróleo la caída fue más abrupta.
Todavía resta que se informen los números de 2013. Según las fuentes consultadas por este medio, el Gobierno ya debería haber hecho públicos los datos y no debería pasar de agosto para que trasciendan. La inquietud en el sector apunta a que más allá de que las cifras deben ser públicas, la ausencia de datos oficiales entorpece el análisis tanto de empresas privadas como de organismos estatales que investigan y diseñan políticas para el mercado. Pero además porque en el caso de las reservas probadas se trata de una información vital a la hora de analizar inversiones, debido a que revela los recursos con los que cuenta un país o empresa para poner en producción y que son explotables a los actuales precios.
Con todo, las perspectivas para los datos del año pasado señalan una moderación en la caída, a partir de los resultados que presentó YPF el viernes pasado, donde informó que sus reservas de crudo y gas crecieron 11% ese año.
Fuente: Cronista
