El 2014 arrancó como un año difícil para las peatonales del centro, en enero, el rugir de los generadores mostraban la ineficacia de la EPE para garantizar el servicio eléctrico. Y ahora, las arterias principales, se vieron invadidas por mesas y paños, transformando la vereda en una feria, a causa del paro de los empleados municipales que discuten las paritarias. Zapatillas, medias, útiles escolares, dvds y joyas de imitación, fueron algunos de los productos que dijeron presente.
Caminando por la peatonal se pueden oír los reclamos de los comerciantes, porque, más allá de que, en algunos casos, se venden imitaciones o productos pirateados, en la puerta de los locales dónde están los originales. En otras ocasiones, los puesteros también bloquean con sus lonas los ingresos a los comercios, despertando la indignación de los empresarios que pagan impuestos.
Ayer, la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales rechazó la propuesta de los intendentes de Santa Fe que apuntaba a un incremento del 27 % en dos pagos de 17 en marzo y 10 en julio, una suma muy lejana a lo pretendido, si se tiene en cuenta que las charlas comenzaron con un pedido del 40%. Así, los funcionarios pidieron que el ministerio de Trabajo dicte conciliación obligatoria, mientras que los empleados decretaron un paro de 48 horas.
Con la ausencia de los trabajadores públicos, los vendedores comenzaron a desplegar sus puestos desde las 8 de la mañana. Lejos de tener algún tipo de control, apenas algunas parejas de policías merodeaban el lugar, supervisando que no haya robos. Al mismo tiempo, los ciudadanos que tenían algunos minutos libres, pudieron volver con sus bolsas por las compras realizadas.
En contraposición a esto, hace algunos días, la Asociación Empresaria de Rosario junto con la Confederación Argentina de la Mediana Empresa, presentaron un informe que indica que en Rosario no ha crecido notablemente la venta ilegal, sino que la mercadería sale de la ciudad con otros destinos.
Redacción ON24