La rúbrica del acuerdo de compensación económica con Repsol, por el cual la empresa española recibirá u$s5 mil millones por la expropiación de YPF, se muestra como el primer gesto por parte del Gobierno de cara a los organismos internacionales de crédito. De aquí a 70 días, el kirchnerismo deberá definir si vuelve o no al mercado financiero mundial de colocación de deuda voluntaria, con la intención de conseguir dólares para reforzar las reservas y mejorar la economía interna.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Club de París (CP), el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos esperan reunirse con funcionarios argentinos en cuatro eventos clave que tendrán lugar hasta mediados de abril, para escuchar qué propondrán en torno a su vuelta a los mercados.
Reunión del CP
El primer evento arranca el lunes 17 de marzo. Ese día, los integrantes del CP se reunirán en la capital francesa para decidir si avanzan o no en la propuesta que presentó en persona el ministro de Economía, Axel Kicillof, en enero pasado, que incluye la regularización de la deuda argentina, que asciende a u$s10 mil millones. En principio, los países acreedores estarían de acuerdo con el plan de pago a largo plazo -a 10 años- e incluso podrían aceptar la alternativa de títulos públicos, algo que el estatuto del organismo no avala pero que podría negociarse. También aceptarían que el pago inicial al contado sea inferior a los u$s2 mil millones pedidos y se realice recién en 2015.
El principal desafío de la Argentina es aceptar el requerimiento de los dos acreedores mayoritarios, Alemania y Japón, de que el FMI interceda en el acuerdo. El Gobierno deberá permitir que el organismo internacional revise las cuentas del país. Sólo así se destrabaría la situación.
Asamblea Anual del BID
Este segundo evento reunirá a los representantes de los principales bancos del mundo, a Kicillof y al presidente del Banco Central, Juan Carlos Fábrega, entre el 27 y el 30 de marzo en Costa de Sauípe, Salvador de Bahía, Brasil.
El BID fue el único que mantuvo activas las líneas de préstamos para el país durante años, y tiene la intención de ampliar los dólares disponibles para la Argentina hasta alcanzar los u$s2 mil millones para 2014. Este dinero será utilizado para obras públicas, reformas administrativas y el refuerzo de reservas tras la liberación de fondos.
Este encuentro permitirá que el país entre en contacto con los enviados de los grandes bancos de inversión del mundo, con el objetivo de analizar alternativas reales de colocación de deuda voluntaria durante el segundo trimestre, a una tasa no mayor a la que se acordó con Repsol: un 8,7%.
Asamblea Anual de Primavera del FMI
Será en Washington entre el 11 y el 13 de abril. El organismo analizará, entre otros temas, la seriedad del nuevo índice de inflación que presentó el Gobierno el pasado 13 de febrero. Desde el oficialismo estiman que contarán con el visto bueno del FMI, por lo que en su próxima reunión, en septiembre, se sacará al país de la calificación de “moción de censura”.
En este encuentro, Kicillof y Fábrega intentarán negociar la apertura de los números y estadísticas nacionales para una auditoría. El 3 de febrero pasado, el organismo incluyó a la Argentina entre los países que no permiten estas revisiones, junto con Venezuela, Ecuador y Eritrea.
Juicio contra los fondos buitres
El próximo 21 de abril, los abogados que representan a la Argentina en el juicio contra los fondos buitre tendrán tal vez la última oportunidad de convencer a los jueces de la Corte Suprema para que tomen el caso.
Los magistrados anunciaron que escucharán a ambas partes, analizarán las posiciones de fondo y estudiarán la posibilidad de embargar o no fondos del Banco Nación.
Si los abogados argentinos convencen a los jueces de tomar el caso, el juicio continuará hasta entrado el 2015. Si no, la sentencia -desfavorable- contra la Argentina sería conocida antes junio, cuando la Corte estadounidense deje firmes los fallos negativos de primera y segunda instancia. Cuando este resultado esté definido, Kicillof y el secretario de Finanzas, Pablo López, deberán actuar con rapidez para establecer una oferta para los fondos buitre y los holdouts.
Fuente: FortunaWeb
