Al momento de la recorrida, la foto sobre los cultivos de gruesa mostraba una condición de muy buena a excelente, promovida por las precipitaciones de noviembre y las condiciones de siembra para cada grano. La distribución de cultivos en el Norte de La Pampa – Oeste de Buenos Aires hoy responde a un 75 % para soja y un 18 % para maíz, y el porcentaje restante se distribuye entre girasol y sorgo, siendo un 5 y un 2 % respectivamente. Si bien se sembraron muchos lotes que estaban anegados, a nivel regional se observó una reducción del área implantada con maíz y girasol respecto al ciclo pasado y un aumento en la superficie destinada a soja.
Si bien la implantación fue muy buena, al momento de la gira se esperaban lluvias antes de fin de año que permitieran asegurar la oferta hídrica para los cultivos. Sobre el Norte de La Pampa existe una mayor necesidad debido al tipo de ambientes, hacia fines de esta semana ya empezarían a relevarse signos negativos por falta de agua en lotes puntuales, mientras que en Buenos Aires el estado general de lo sembrado podría aguantar en buenas condiciones unas semanas más.
Por otro lado, se observaron varios campos sin alquilar y se relevaron comentarios respecto de este tema, dado que inclusive muchos lotes se alquilaron tarde y esto agrava aún más la complicada situación de malezas que existe en esta zona, al igual que en muchas regiones del área agrícola nacional.
Soja
Durante la recorrida se observaron lotes de soja de primera, la cual al momento ya estaba sembrada prácticamente en su totalidad, a pesar de algunas pocas siembras tardías que se habían retrasado. Se estaba avanzando con lotes de segunda ocupación, inmediatamente después de cosechados los cuadros de trigo y cebada. Se destacó la velocidad con la cual se estaba sembrando luego de la cosecha de fina, buscando aprovechar la humedad disponible y la ventana de siembra, esta última ya algo retrasada por el ciclo de los cultivos de invierno.
Los colaboradores asignaron una distribución de siembra que respondía a una relación variable entre soja de primera y segunda, con valores que iban desde 70/30 hasta 90/10 según la localidad relevada.
Los nacimientos en los cuadros de primera fueron muy buenos, aunque en algunas zonas puntuales (e.g. Pehuajó) se destacó algún retraso de entre una semana y diez días en la emergencia, debido a las bajas temperaturas que se registraron a la siembra. Sin embargo, no se esperaba que esto fuera un problema dada la gran plasticidad del cultivo.
La condición de los lotes de soja era de buena a muy buena, con plantas que estaban entre emergencia y lotes recién sembrados, hasta cinco o seis nudos (V5-V6) aquellos lotes más adelantados. En general, la mayoría de los cuadros se observaron entre emergencia y dos o tres nudos (V2-V3), siendo los más adelantados aquellos sembrados hacia el noroeste de Buenos Aires sobre la RN Nº188.
A nivel sanitario los colaboradores no destacaron grandes problemas por plagas o enfermedades, sumado a que en muchos casos se estaban realizando las aplicaciones pertinentes según el monitoreo de los lotes. Sobre el extremo oeste de la RN Nº5 y en La Pampa se comentaron ataques de orugas cortadoras con una incidencia considerable, aunque el mayor daño se observó en lotes de girasol más que en soja.
Maiz
El área sembrada con maíz en esta zona evidenció una caída respecto al ciclo pasado, que según lo relevado oscila entre un 5 y un 15 % a nivel regional. Esta merma responde a varios motivos, como son el precio de mercado del cereal o la alta inversión inicial que representa la siembra, aunque en algunos partidos de Buenos Aires se recuperaron varios lotes que habían estado anegados durante la campaña pasada.
A su vez, se observó una alteración en la distribución de las fechas de siembra, con una tendencia a volcarse hacia maíces tardíos aunque esto se observó en mayor medida hacia el oeste del territorio bonaerense, a partir de la RN Nº33 en partidos como Trenque Lauquen y Pellegrini, y sobre la provincia de La Pampa. En estas localidades la relación se ubicó entre 70/30 y 60/40, y sobre el norte pampeano se llegó a invertir y los cuadros sembrados responden desde un 60 a un 80 % sembrado en diciembre.
Las razones de buscar sembrar un maíz tardío obedecen a una mayor estabilidad de rinde y a los excelentes resultados que vienen mostrando los materiales en las últimas campañas, aunque por otro lado en partidos como Pehuajó, C. Casares y 9 de Julio este año se buscó aprovechar las buenas condiciones para maíces tempranos y su potencial, y entre el 70 y el 90 % está sembrado en esta fecha.
Se destacó una gran demanda de bolsas para siembras de diciembre a última hora, entendiendo que los productores decidieron concretar la intención sobre el traslado realizado de siembras tempranas, terminando con la incertidumbre que muchos tenían respecto de sembrar soja si en noviembre-diciembre no se recibían lluvias.
Al momento de la recorrida las siembras de primera ya habían finalizado, y más del 50 % de lo tardío ya estaba implantado, avanzando firme con lo restante y faltando algunos cuadros también de segunda ocupación detrás de la cosecha de fina.
El estado de los cuadros era de bueno a excelente, con plantas que iban entre 6 a 10 hojas (V6-V10) sobre lotes de primera y desde recién sembrados hasta tres o cuatro hojas (V3-V4) para siembras tardías.
En general se espera la floración de las fechas tempranas para fines de diciembre, entre las fiestas, aunque sobre el oeste de Buenos Aires en el corredor de la RN Nº5 comentaron algunos retrasos en el ciclo del cultivo, debido mayormente a las bajas temperaturas durante la emergencia. El atraso de alrededor de diez días en muchos lotes podría llegar a colocar esta etapa crítica sobre enero, con el riesgo que esto implica por las bajas probabilidades de lluvias y la elevada demanda atmosférica.
A nivel sanitario no se registraba incidencia de plagas ni enfermedades de forma considerable, aunque se comentó una leve presencia de roya en algunos materiales, mayormente sobre el oeste de Buenos Aires. De igual forma, se mencionaba un ataque de oruga cortadora aunque muy leve en relación a los efectos que tuvo sobre el cultivo de girasol.
Se estaban fertilizando en muchos casos los cuadros de primera, aprovechando la buena condición que mantenían al momento de la recorrida. La misma se esperaba se mantenga con alguna lluvia durante fines de diciembre, aunque al momento de este informe la necesidad de humedad sobre el Norte de La Pampa ya estaría siendo importante.