“Nos pasamos opinando y discutiendo varios días que la ex Presidente, le dio una entrevista por primera vez a un periodista independiente, Luis Novaresio”.
Cristina Fernández se empeñó durante toda la conversación en tratar de esclarecer la verdad, quien con sus artes y su astucia televisiva, no hizo más que dejar “su” verdad.
Cualquiera sea la cuestión de fondo, en la Argentina lo que se sigue discutiendo es si Cristina si o si Cristina no; si Cambiemos si o no; y en el fondo estamos discutiendo sobre el pasado y sobre el presente, analiza Walter Castro, y se anima a decir, que no se discute lo importante, lo sustancial, lo estructural de cara al futuro.
Por ejemplo, en la gestión de Cristina o de “los Kirchner”, de 2011 a 2017 la Argentina no creció nada; se fueron del gobierno y dejaron 30% de pobres – medido por la UCA – pero sí, el gasto público subió de 22 a 23% del PBI a más de 40%, es decir, el 40% de la economía, es gasto público; y aun así, habiéndose duplicado los impuestos incluida la inflación en materia impositiva, tenemos 7% de déficit, entonces la pregunta es ¿en qué gastan todo ese dinero que recaudan?, que deja anémico al sector privado, que le sustrae crédito, quita inversión y buen empleo… ¿cómo es que no alcanza?.
Y esta cuestión estructural no se discute, como tampoco que hay tantos jubilados como gente trabajando y tampoco se discute que hay millones de personas en negro contra otros tantos anotados en el sector privado. Es un país que con este déficit fiscal, con este gasto público, y estos impuestos; nunca será competitivo por más que encaren reforma laboral e impositiva. A menos que se hagan las reformas estructurales que nadie discute.
El Presidente tiene una cosa clara; la gente le da el apoyo inclusive en los lugares más difíciles pero el aval al cambio no condice con la discusión de los políticos.
El análisis completo de Walter Castro para ON24 en el siguiente video:
