Argentina sigue siendo el país más caro del continente en lo que se refiere a tecnología. El gobierno tomó la decisión de bajar las cargas arancelarias para computadoras y notebooks, en busca de reducir los costos de los productos. En tanto, Sergio Airoldi, titular de Air Computers, explicó a qué se deben los altos precios que se pagan y comentó que son consecuencias de un proceso de producción ineficiente, apuntando particularmente a Tierra del Fuego.
Un informe publicado por El Cronista asegura que en el ranking de precios Argentina se ubica en la cima como el más caro; detrás se encuentra Uruguay con costos 35% inferiores. Tomando como base Estados Unidos, un smarphone se paga un 109% más caro.
Según explicó Airoldi en la mañana radial de Fisherton CNN, “el costo de derecho se corregirá a partir de abril, pero no cambiarán los costos logísticos que son muy caros”. El empresario dijo que la falta de trenes, el alto precio del gasoil y el traslado en camión contribuyen a inflar valor final que abonan los consumidores. Además sumó: “Hay muchos impuestos nacionales, provinciales y municipales; cada uno pone una cuota para solucionar sus problemas económicos, pero no hay una cuestión integral de revisión de la carga impositiva que pagamos al comprar cualquier producto”.
En tanto, en una nota anterior con este medio, el titular de Air Computers ya había adelantado que, en su opinión, la nueva medida del gobierno podría bajar el costo en un 15 o 20% como máximo. También es necesario aclarar que dicha medida no afectará al mercado de smartphones. El arancel para el resto de los productos informáticos terminados se reducirá un 35%, mientras que para los componentes pasará a ser cero.
¿Qué pasa con los smartphones?
Para Airoldi, el mercado de los teléfonos inteligentes sigue siendo el más problemático. Puntualizó: “Es un problema fabricar en Tierra del Fuego y también lo es la carga impositiva que tiene un smartphone”. Para el empresario, es fundamental replantear el perfil productivo de la provincia.
“Los productos que se siguen fabricando allí tienen una barrera arancelaria muy alta para proteger una industria deficiente como la de esa provincia”, remarcó. Luego, añadió: “Está a más de 3000 kilómetros de Buenos Aires, con lo cual ya hay un enorme problema logística. La gente en Tierra del Fuego gana cuatro veces más que en cualquier zona industrial del país. Creo que debería tener otro perfil, más relacionado a lo turístico o a la pesca, todo lo relacionado a la zona y lo que sea más cercano como mejorar el acceso de los barcos”.
Por último, sumó: “El smartphone es una tecnología compleja y que avanza demasiado rápido; es difícil que Argentina pueda fabricar para abastecer todo el mercado local. La dinámica y la evolución del producto hacen que no se pueda instalar un proceso productivo”. Para el hombre de Air, “deberían haberse incluído en la medida”.