Los factores genéticos más frecuentes están identificados y se estima que entre el 20 y el 40% de los pacientes con esta enfermedad tienen antecedentes familiares. El Dr. Germán Perez, integrante del Área de Medicina Genómica de Gammalab, nos informa al respecto.
¿Qué es la Trombosis Venosa?
La trombosis venosa es una enfermedad frecuente producida por la coagulación de la sangre en el interior de las venas, y que puede derivar en la Trombosis Venosa Profunda, en casos de inmovilidad prolongada, o en Embolismo Pulmonar si el coágulo llega a pulmones.
¿Se puede prevenir la Trombosis Venosa?
Sí, la identificación de los pacientes con riesgo aumentado de desarrollar trombosis venosa y el tratamiento profiláctico adecuado contribuyen a disminuir las complicaciones asociadas. Los factores de riesgo para esta enfermedad incluyen tanto factores hereditarios como factores adquiridos. La relevancia del componente genético está dada por el hecho que entre el 20 y el 40 % de los pacientes con trombosis venosa presentan antecedentes familiares de la enfermedad.
¿Cuáles son los factores genéticos relacionados a la Trombosis Venosa?
En los últimos años se han identificado diversos factores genéticos que predisponen a la trombosis. Sin embargo, en el presente sólo dos de ellos tienen mayor prevalencia en la población, y por lo tanto se realiza su diagnóstico molecular: el Factor V Leiden y la mutación G20210A de la Protrombina (Factor II).
¿Cuál es la importancia del Factor V Leiden en los procesos trombóticos?
El Factor V de la coagulación, codificado en el gen F5 (cromosoma 1 q23), se sintetiza en el hígado y circula en sangre en forma inactiva. Cuando este factor se activa (Factor Va), desencadena eventos que favorecen la coagulación.
La Proteína C activada (APC) controla al Factor Va evitando que los coágulos generados se incrementen demasiado. Para ello, la APC corta al Factor Va en lugares específicos provocando su inactivación.
Se denomina Factor V de Leiden, cuando una mutación en el gen F5 (c.1691G>A) provoca un cambio en la proteína (p.R506Q) impidiendo que APC la inactive. Por lo tanto, continúa activado y aumenta la probabilidad de trombosis.
El riesgo de las manifestaciones clínicas dependen del número de copias genómicas alteradas por cada célula, de forma que si únicamente presenta la mutación uno de los dos alelos (heterocigótico), el riesgo de manifestar el proceso es menor, que cuando las copias de ambos alelos están afectadas (homocigótico).
¿Cuál es la importancia de la mutación G20210A de la Protrombina en los procesos trombóticos?
La Protrombina (Factor II) es un componente clave por su doble papel promoviendo la coagulación por retroalimentación positiva y la anticoagulación mediante la activación de la vía de la Proteína C. Está codificado en el gen F2 (cromosoma 11 p11.2) y la presencia de la mutación c.20210G>A (región 3’-no codificante) provoca un aumento de los niveles plasmáticos de Protrombina lo que provoca un incremento en el riesgo (2,8 veces) de desarrollar trombosis venosa, infarto de miocardio y trombosis en venas cerebrales.
Al igual que en el Factor V Leiden, el riesgo de las manifestaciones clínicas dependen del número de copias genómicas alteradas por cada célula. Las personas que presentan la mutación en uno de los dos alelos (heterocigótico) tienen 6 veces más probabilidades de sufrir una trombosis que la población normal. Este riesgo se incrementa aún más si se da el uso de anticonceptivos, terapia de estrógenos, tabaquismo, diabetes o hipertensión arterial.
El Factor V Leiden y la mutación G20210A de la Protrombina (Factor II) se pueden determinar mediante una prueba de ADN a partir de una muestra de sangre. En Gammalab se realizan estos estudios mediante técnicas de amplificación y detección fluorescente que permiten detectar estas mutaciones presentes en un paciente.
Fuente: Dr. Germán Perez, integrante del Área de Medicina Genómica de Gammalab