Los productores de arándanos de la región mesopotámica viven una situación preocupante debido a la inesperada caída en la cosecha de este año. En esta temporada 2016 se registró una superproducción y la consecuente caída de precios de la fruta en los mercados internacionales, especialmente en Estados Unidos, que compra el 70% de la fruta exportable de Argentina.
Concretamente, se estima un total de 2 millones de kilos de arándanos que quedaron sin cosechar, según las proyecciones que se habían realizado al comienzo de la cosecha.
“Los productores decidieron dejar de cosechar porque si lo seguían haciendo perdían plata”, explicó Omar Chiarello, presidente de la Asociación de Productores de Arándanos de la Mesopotamia Argentina (APAMA), que nuclea a más de cincuenta productores en su mayoría de Concordia y algunos de Corrientes.
Los productores nucleados en APAMA se reunieron para analizar la cosecha 2016. La situación crítica del arándano comenzó hace unas semanas, debido a la sobreoferta en los mercados y el consumo estancado de la fruta que ocasionó que su precio se haya devaluado significativamente.
Los productores locales esperaban una buena cosecha y se había estimado una producción regional de arándanos solo para exportación de 9 millones de kilos en las más de 1000 hectáreas de la zona.
Además, se perdieron alrededor de 70 mil jornales potenciales, incluidas tareas de campo, packing y logística. “El factor fundamental fue la caída abrupta de los precios internacionales, que derivó en la consecuente finalización anticipada de la zafra de este año”, agregó Chiarello, informando que ya se dio por concluida la temporada en Concordia, registrándose el final dos semanas antes en comparación con el año pasado.
“La fruta que no se cosechó se descartó o bien se podó la planta con toda la fruta, cosa que nos dolió como productores pero que debimos hacer para continuar con optimismo de cara a la cosecha del año que viene”, finalizó el dirigente.
Por otra parte, los productores, tras realizar un balance de cosecha, señalaron que los mayores costos de cosecha, de logística, la tardanza en el pago de reintegros y devolución de IVA, son algunos de los factores que quitan competitividad a la producción nacional. (Fuente: Prensa APAMA)