Mientras el mundo intenta salir del pasmo que provocó la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, las especulaciones respecto a los movimientos del mercado circulan a una velocidad frenética.
Poco se sabe sobre la medida en la que el presidente electo de la mayor economía del mundo aplicará las promesas vertidas en campaña, las cuales apuntaban, en términos generales, hacia una economía más cerrada. En este contexto, la pregunta que sobrevuela es si Donald Trump se inclinará por la moderación o insistirá con sus osadas propuestas.
Según el economista Roberto Cachanosky, que hizo declaraciones en la mañana radial de Fisherton CNN, el resguardo estadounidense a los movimientos pendulares demasiado bruscos tiene asidero en las instituciones. “Hay que recordar que en la crisis del 30, fue la Corte Suprema de Justicia la que frenó las barbaridades que quería hacer Roosvelt con el New Deal. En última instancia, siempre es importante tener de respaldo a las instituciones cuando tenés personajes como estos en competencia por el poder, en tanto pueden ponerles limites”.
¿Oportunidad o amenaza?
“Es muy difícil saber de antemano que postura va a asumir el capital”, reconoció Cachanosky en base a la incertidumbre que reina en estas horas. Y ahondó, “lo cierto es que hay más de 190 países en el mundo, algunos muchos más atractivos que Argentina para invertir. En el peor de los casos, si los capitales se fuesen de EEUU, quizá haya otras opciones, como por ejemplo Brasil, que ha hecho una propuesta interesante de no ampliar el gasto público por encima de la inflación durante 20 años. Con eso, los capitales pueden mirar antes Brasil que Argentina (…) Todavía Cambiemos no ha hecho demasiado para atraerlos, con la presión impositiva que hay, es difícil”.
Respecto a impactos colaterales, el economista subrayó que una de las consecuencias esperables puede ser cambios en la cotización de los commodities (de los que Argentina tanto depende). “Hay que ver qué pasa, China exporta a Europa y a Estados Unidos; si la economía estadounidense se cierra, es posible que China importe menos y es eso pegue en el precio de los commodities. Pero estamos haciendo una triple carambola, no sabemos bien que va a pasar”, concluyó.