Luis Etchevehere fue reelecto ayer como presidente de la Sociedad Rural Argentina. Cumplirá así con su tercer mandato al frente de la institución, el cual se extenderá desde 2016 hasta 2018. En diálogo con Fisherton CNN, en el programa Con Sentido Común, declaró: “La inversión de este año será de 58 mil millones de dólares. No hay otro sector que llegue a ese monto ni por asomo en un año”. También expresó que el desafío más importante será ganar en competitividad.
Etchevehere se mostró optimista con respecto a cómo juega la coyuntura actual para el sector. “Con las nuevas reglas de juego vemos una reactivación y creemos que habrá una mayor producción”, expresó. Como prioridades para el agro, explicó que se debe “avanzar en la cadena de valor, industrializar los productos”. El otro pilar de su discurso fue la importancia de reinsertarse en el mercado, fomentando la competitividad frente a los otros actores comerciales: “Tenemos que pensar en nuestros competidores y ver lo que nos falta en relación a ellos. Tienen monedas estables sin inflación, financiamiento a largo plazo con tasas de un dígito, acuerdos comerciales sin aranceles, infraestructura que ayuda a bajar costos y seguro agrícola multiriesgos”.
En cuanto al reclamo por la baja de las retenciones de la soja, puso paños fríos: “No tenemos motivos para dudar de la palabra del gobierno. La cumplieron el año pasado y fue exitoso, el campo estuvo a la altura y salió fuertemente a invertir”. Según explicó, estaba a la espera de conocer una postura oficial clara para poder opinar con mayor profundidad sobre el tema.
El cambio de gobierno tampoco fue pasado por alto. Etchevehere habló de una “nueva etapa de construcción”. Por otro lado, afirmó que durante el kirchnerismo se desarrolló una de “resistencia, denuncia y confrontación”. Según sus propias palabras: “Hay que trabajar de forma inteligente y recuperar el mercado que hemos perdido por vivir con el gobierno anterior”.
Finalmente, habló de la relevancia de abrir nuevos mercados y de concientizar a los exportadores acerca de los posibles nuevos destinos de la producción. “Estamos difundiendo cuáles son esas oportunidades y dónde están. El mundo está demandante, nadie va a venir a tocar timbre para comprar”, concluyó.