Uno de cada dos rosarinos fue víctima de la inseguridad en el último año. El dato surge de la Encuesta Anual de Victimización del Delito en Rosario, realizado por el Centro de Investigaciones Sociales y Económicas de Fundación Libertad, junto a la consultora Mautone & Asociados; en el que además, se advierte una baja presencia policial en las calles y una tendencia sostenida en altos niveles de sensación de inseguridad.
“Los datos recabados muestran un alto porcentaje de victimización, siendo las mujeres jóvenes el grupo más afectado”, reza el estudio del think tank rosarino. Y apunta sobre la preeminencia delictiva en los distritos Noroeste y Norte, donde el porcentaje de victimización asciende al 66% y 62,9% respectivamente.
De la comparación con ediciones anteriores, se observa un crecimiento de los índices de victimización en algo más de 11 puntos porcentuales entre 2015 (39,3%), y 2016 (50,2%); al tiempo que la sensación de inseguridad, es decir, la percepción de los encuestados sobre la posibilidad de ser víctimas de un delito en los próximos 12 meses, se mantiene por encima del 80%.
Otros datos salientes del estudio son los siguientes:
El 50,2 % de los encuestados (o miembros de su familia) sufrieron delito en la ciudad de Rosario en el último año.
Dentro del universo de victimizados, las mujeres aparecen como el grupo más afectado con un 50,7 %; una cifra levemente superior a la población victimizada de hombres, que es del 50%.
El 52,7 % de los victimizados no hicieron denuncia. Entre los que hicieron la denuncia, el 26,1 % lo hizo en comisarías; el 2,8 % en tribunales; y el 0,3 % ante otras instancias. El 18 % de los entrevistados no pudo precisar este aspecto.
Poco más de cuatro de cada diez rosarinos encuestados (40,1 %) sostienen que la policía pasa frente a su casa, tanto en vehículo como a pie, por lo menos una vez al día. Mientras que el 20,7 % dice que la frecuencia es de, por lo menos, una vez a la semana.
Los distritos Noroeste y Norte son los dos primeros en el ranking de victimización, al mismo tiempo que son los dos últimos en el de presencia policial. Coincide una baja presencia policial y un alto nivel de delito.
Poco más de la mitad de los consultados (50,1 %) cree que es probable que sean víctima de un delito en los próximos doce meses. En tanto el 25,1 % califica esta situación como muy probable; el 8 % lo reduce a poco probable; y el 15,7 % no arriesga porcentaje alguno a este respecto.
La sensación de inseguridad (medida a partir de aquellos que consideran muy probable o probable que les suceda un delito en los próximos doce meses) está presente y se mantiene en niveles altos del 81% promedio para el período 2014-2016.