La esquina donde funcionó históricamente la vieja usina de la EPE, un predio de 5.000 m2 ubicado en unas de las mejores zonas de la costa central, frente al río, será recuperada a partir de la desafectación del terreno, hoy bien público, para poder ser destinado a una licitación que tiene como objetivo un masterplan que comprende una torre de residencias, en condiciones de ser habilitada para alcanzar 23 pisos, un área gastronómica y un centro de interpretación ambiental, promovido por el Ministerio de Medio Ambiente de la provincia.
El desafío para la provincia es agilizar los tiempos burocráticos para que le permita convocar a desarrolladores que deberían adaptarse a una idea ya definida por el gobierno de Pullaro. Desde los ojos del privado, no deja de ser un desperdicio que parte de esos valiosos metros cuadrados se destinen a un organismo público, que bien podría funcionar en una locación menos costosa.
Por otro lado, en aras de acelerar la transformación que pretende el Intendente Pablo Javkin de Rosario, ese “cambio de piel” que se propone para recibir el año próximo el tricentenario de la ciudad, amerita la búsqueda ágil de un predio para relocalizar los antiguos talleres de la empresa de energía.