Por: Darío H. Schueri – Desde Santa Fe Capital
La Cooperativa SanCor de Sunchales bien podría encuadrarse como víctima de los daños colaterales o “efectos no deseados” (que podrían haberse previsto) de lo que sutilmente el gobierno describe como “corrección de las variables económicas”, con su correspondiente traducción peronista: “ajuste salvaje”.
SanCor registró una pérdida de $ 1.527 millones en su último informe trimestral. Pero no todo sería por culpa de las últimas decisiones económicas del gobierno de Macri. Hay otro trasfondo concordante con la cultura política y económica vivida en la última década.
El Presidente de la Sociedad Rural Argentina Luis Miguel Etchevehere pasó por su homónima local dentro del marco de los itinerante festejos de los 150 años de vida, y dejó frases muy elocuentes, tales como “salimos de los reclamos para encarar una agenda de trabajo” (con el gobierno nacional) ó “el gobierno no nos dio ningún privilegio (eliminando las retenciones), sino que nos puso en igualdad de condiciones para poder producir”; y de inmediato arrojó una cataratas de cifras que evidencian el sabido potencial del sector. Dijo que no hay fórmulas mágicas ni inmediatas, ante la requisitoria sobre el fantasioso “segundo semestre”.
Cuando le preguntaron por SanCor, evitó adentrarse en el meandro de la empresa “para no ser irrespetuoso, porque además es una cooperativa y su destino lo tienen que definir los asociados”, aclaró; pero no evitó definir que con las nuevas reglas del mercado abierto que propone Macri – y el mundo – , no hay lugar para errores de diagnóstico.
El “caso SanCor” navega en un mar de rumores e incertidumbre. Los propios asociados (unos 1400 tamberos) suelen consultar con la prensa sobre las novedades de “su” empresa, cuyos administradores ya les adelantaron que habrá están encarando grandes cambios realizando ajustes internos (se habla de un ambicioso programa de retiros voluntarios) entre otras alternativas que se están analizando con prestigiosas consultoras en Buenos Aires.
Todo mal. SanCor le vendió a Venezuela 40 mil toneladas de leche en polvo por 158 millones de dólares, de los cuales tienen vencidos y en mora casi 50; además tiene en los depósitos mercadería por 120 millones para ése país, que no pueden entregarle por los problemas económicos que atraviesa el gobierno de Maduro.
China, destinatario principal de leche premiun para lactantes dispuso una auditoria para todas las lácteas proveedoras del mundo que duró 8 meses, lapso durante el cual no compraron productos, hecho que generó el quebranto de casi todos los representantes, entre ellos el de SanCor. Hoy están trabajando con uno nuevo.
Allegados a la cooperativa sunchalense (que en el 2006 estuvo a punto de pasar a manos de Adecoagro de George Soros a cambio de una deuda de U$S 167 millones, aliviada por Hugo Chávez quien desembolsó 80 millones de dólares a cambio de leche en polvo, merced a gestiones de Julio de Vido) argumentan que el gobierno de Mauricio Macri “les soltó la mano”, actitud que desmienten en Buenos Aires. El propio presidente de la UCR nacional José Corral dijo que encaró gestiones en ese sentido.
Especialistas en lechería analizan que en el actual contexto de escasa producción, la empresa quedó sobredimensionada para una estructura de 15 plantas y 4700 empleados. “No se puede sostener una empresa láctea con 700 litros por operario cuando la media mundial es el triple”, adujeron. Y desde el sindicato ATILRA replican “y tampoco con los fastuosos costos operativo que tiene SanCor”. Lo cierto es que a SanCor o le falta leche o le sobra estructura.
Una fuente calificada del sector confió que “los actuales directivos, con el presidente Gustavo Ferrero a la cabeza son conscientes de que hay que reducir costos operativos para seguir funcionando en un mercado donde no hay ni leche ni mercado externo; cambiar deuda cara por deuda barata, y finalmente formalizar una alianza con algún jugador nacional y multinacional sobre alguna línea de productos que les dejarían importantes recursos.
En cuanto a la actitud del gobierno nacional, por un lado está el Ministro de la Producción Francisco Cabrera que brega para que SanCor siga siendo cooperativa con los cambios descriptos, y en el otro vértice la denominada “línea pragmática” del gobierno, con el presidente del Banco Nación Melconián a la cabeza, el Jefe de Gabinete Marcos Peña, el Ministro del Interior Rogelio Frigerio que abogan por ser neutrales en esta contienda; “es una cuestión de mercado”, preconizan. El propio Presidente Macri no recibe a los directivos de SanCor.
Para el gobierno santafesino “SanCor no puede terminar mal porque es una cooperativa que tiene 4700 trabajadores, 1400 tamberos y 20 mil personas que dependen de ella con servicios adicionales; por eso apoyamos la reestructuración encarada y seguimos pidiéndole al gobierno nacional que se comprometa”, abogó el Ministro de la Producción Luis Contigiani.
