Luego de lo establecido en la ciudad de Santa Fe y la polémica desatada en Rosario y Funes, donde hay proyectos similares en danza, otra localidad de la región aprobó, a través de su Concejo, la prohibición de la actividad de “cuidacoches”. Se trata de la ciudad de San Lorenzo, donde sus concejales sancionaron esta semana una ordenanza que prohíbe a los trapitos trabajar en la vía pública.
La iniciativa nace luego de las reiteradas denuncias de los vecinos por estas prácticas que muchas veces terminaban en extorsión o con hechos de violencia. Fue aprobado por la mayoría automática con la que cuenta el oficialismo de la Municipalidad que comanda el intendente Leonardo Raimundo.
“Prohíbase en la vía pública la actividad de cuidado de vehículos y/o cuidacoches, servicio de limpieza o lavado de vidrios y/o de vehículos y toda otra actividad de similares características en todo el ámbito de la ciudad de San Lorenzo”, reza el texto que comenzará a regir la próxima semana y que autoriza a inspectores a labrar multas y a la policía a actuar en consecuencia.
Por su parte, el presidente del cuerpo deliberativo de la ciudad del Cordón Industrial y concejal oficialista Hernán Ore, afirmó: “Nuestra ordenanza, de acuerdo a lo que he visto en las de otras localidades, aborda la cuestión de manera integral: se prohíbe la actividad y se imponen multas, que sabemos que muchas veces es muy difícil de ejecutar”.
La norma impone una multa de 10 a 200 unidades fijas y/o la realización de tareas educativas o concientizadoras a quienes incumplan la norma y hace referencia a toda persona que realice las tareas mencionadas y a quienes “mediante actos determinados obstruya o altere la fluidez o seguridad del tránsito, o que mediante actos extorsivos y/o cualquier otra manera se arrogue preferencias de uso sobre la calzada o parte de esta sin autorización alguna de la autoridad”.
Sin embargo, según detallaron desde el oficialismo, “no es la idea criminalizar a los cuidacoches” y por eso la norma da la posibilidad a los sanlorencinos que realizan esta tarea de que puedan ser incorporadas a programas de capacitación, cursos y talleres para desarrollar habilidades y competencias que faciliten su inserción en el mercado laboral formal.
FUNES QUIERE SUMARSE
El concejal funense Juan Ignacio Rímini presentó un proyecto en el Concejo Municipal para aplciar sanciones a quienes realicen la actividad de “cuidacoches” en Funes. Si bien por el momento no es una práctica extendida dentro de la ciudad, la idea es que se actúe de manera preventiva.
“El proyecto es más bien preventivo, hemos visto casos de trapitos trabajando aisladamente en la ciudad, pero Funes está creciendo demográficamente de una forma exponencial, muy fuerte, y consideramos que hay que tomar medidas preventivas”, advirtió el concejal radical de Juntos por el Cambio
Según el proyecto presentado, lo que se busca es sumar al Código de Faltas Municipal en el anexo “Faltas por el Uso Indebido del Espacio Público”, las sanciones para los cuidacoches. Se penará con multa de 10 a 30 a litros de nafta súper, el ejercicio de actividades lucrativas no autorizadas en el espacio público. Es decir, la multa oscilaría entre los 10 mil y 30 mil pesos a la fecha.
En tanto, quien realice actividades lucrativas no autorizadas en el espacio público, en volúmenes y modalidades similares a las del comercio establecido, será penado con multa de treinta 30 a 200 litros de nafta súper. A su vez, se aclara que “no constituye contravención la actividad de los artistas callejeros en la medida que no exijan contraprestación pecuniaria”.
LA SITUACIÓN EN SANTA FE Y ROSARIO
La Municipalidad de la ciudad de Santa Fe ya trabaja en el cumplimiento de la nueva ordenanza, aprobada a solicitud del intendente Juan Pablo Poletti, que regula esa actividad callejera y prohíbe las tareas “de cuidado y/o limpieza de vehículos en la vía pública”.
Ya los operativos en la ciudad capital de la provincia son ejercidos por agentes de tránsito y control detectando cuidacoches en la zona de estacionamiento medido, como primera etapa. Se los notifica acompañados por la policía y, ante una tercera advertencia, “la fuerza pública puede intervenir”, destacó el secretario de Gobierno y Control de la Municipalidad de Santa Fe, Sebastián Mastropaolo, en declaraciones públicas.
Con esta situación en la capital provincial, el concejal rosarino Federico Lifschitz recogió el guante y presentó un proyecto similar, eliminando por completo la actividad de los cuidacoches en Rosario. “Tiene como finalidad erradicar la práctica informal del cuidado de vehículos en las calles dentro del éjido de la ciudad de Rosario”, reza la iniciativa.
Recientemente el Concejo Municipal ha debatido una vez más en la comisión de Obras Públicas la realidad de los “Cuidacoches” en Rosario. En la reunión, que se celebró el martes 7 de mayo, se intercambiaron distintas posturas con respecto a los “trapitos”, tema sobre el que inclusive hay distintos proyectos presentados.
Se trata de iniciativas de prohibición, como la presentada por el edil Carlos Cardozo, y otras de regulación, como la de los concejales Fernanda Gigliani y Lisandro Cavatorta. En tanto, el actual secretario general de la Municipalidad, Miguel Tessandori, quien fue el primero en poner el grito en el cielo ante la posibilidad de la sindicalización de “trapitos” en Rosario, dejó en el Concejo mientras era edil, un proyecto que buscaba modificar el Código de Convivencia y multar a aquellos que “obstruyan el tránsito, hagan uso preferencial de la calzada o generen extorsiones”.