El 2023 finalizó con un buen porcentaje de ocupación en los locales comerciales rosarinos. Según el relevamiento presentado por el Colegio de Corredores Inmobiliarios de Rosario (COCIR), la ciudad presenta una vacancia promedio del 10%. No obstante, desde el mismo organismo auguran que la tendencia decreciente se podría revertir en parte en los próximos meses, como consecuencia de la caída en la actividad comercial.
Las dudas con respecto al futuro cercano de este segmento del mercado inmobiliario surgieron a partir de los últimos datos publicados por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Allí, se expone una caída anual del 13,7% anual en las ventas minoristas de diciembre, finalizando el año con una retracción del 3,4%. El guarismo cobra un tinte todavía menos alentador si se considera que el dinamismo de la actividad estuvo impulsado por la Navidad.
Vale aclarar que por estacionalidad la temporada de verano suele presentar una merma en la concreción de contratos de alquiler de locales. Sin embargo, Alejandro Bassini, coordinador del Departamento de Estadísticas de COCIR, adelantó: “Las cifras publicadas por CAME prenden algunas alarmas indicando que vamos a un escenario recesivo y complejo. Tenemos que superar esta etapa de 60 o 90 días de una manera transitable; después, con el rol del corredor inmobiliario adecuando cada contrato a cada realidad, podremos avanzar, entendiendo que es muy probable que los números arrojen una merma, o sea, una depreciación”.
En este sentido, Bassini destacó la necesidad de los corredores de comprender el contexto y el tipo de cliente con el que trata: “Vemos con preocupación el escenario recesivo. Si queremos ajustar contratos de forma mensual por índices del IPC, puede que algunos tengan dificultades en pagar. Depende del segmento de negocio y de la proyección del contrato. Las variables de indexación deben acomodarse a la idiosincrasia de cada negocio”.
Actualmente, ejemplificó, una unidad de entre 10 y 25 metros cuadrados en una galería comercial, en la línea de calle de la zona céntrica puede rondar entre los 30.000 y los 50.000 pesos. Sin embargo, la franja se estira mucho más cuando se apunta a puntos estratégicos de alto tráfico como la Galería La Favorita o Calle Angosta, alcanzando los 150.000 o 200.000 pesos. Contratos superiores a los 500 mil pesos, en general, se pactan en dólares con un canon estandarizado por todo el año.
Así, el especialista auguró que se verá que la vacancia aumente “un poco”. No obstante, aclaró que “se intentará, a través de distintos espacios y áreas, que haya una reducción de daño y que no sea un impacto tan grande para la economía local y regional”.