En la última reunión del Consejo Directivo de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), Domingo Cavallo, el ex ministro de Economía de Carlos Menem y Fernando de la Rúa, disertó para los presentes y llamó a “eliminar la inflación es una precondición para poder resolver los demás problemas”.
El economista enunció una serie de pasos para lograr este propósito entre los que se encontraron eliminar el déficit fiscal y abrir la economía, aunque remarcó que se debe hacer en un marco de estabilidad para luego implementar “las reformas de fondo que necesita la Argentina”.
En este sentido, recordó las medidas que aplicó cuando estuvo al frente del Palacio de Hacienda en los años 90: “En ese momento pudimos hacer todas las reformas que se hicieron porque con la convertibilidad encontramos la forma de crear un clima de estabilidad y previsibilidad para los que tenían que formular el presupuesto nacional, en las provincias y municipios y para las empresas que tenían que hacer cálculo económico y tomar sus decisiones de inversión y de producción”.
Por otro lado, habló del sistema monetario y defendió la existencia del peso y de la moneda estadounidense, sin embargo, contradijo a Cristina Fernández de Kirchner “que busca que la gente no utilice el dólar”.
“Eso es una utopía. A la gente no le vas a poder prohibir, mientras haya inflación, que trate de proteger el valor de sus ahorros. Y sabe que la práctica sencilla es ahorrando en dólares o en activos que estén dolarizados y que sean seguros”, advirtió.
Cavallo, en consecuencia, sostuvo que “se puede pensar en un régimen como la convertibilidad y, si no se logra convencer a la gente que ahora con respaldo de una moneda patrón va a funcionar la convertibilidad, a lo mejor es imprescindible ir a una dolarización, pero nada de eso se puede decidir de antemano. Se va a poder decidir dependiendo de la circunstancia y de la actitud de la gente y de la capacidad de persuasión y convencimiento que tenga el nuevo Gobierno y el equipo”.
Por último, fue auspicioso sobre la idea de que el próximo gobierno pueda encontrar equilibrio económico: “Si se está bien preparado para introducir las reformas necesarias y acierta con el plan de estabilización, previo reajuste de los desequilibrios que hay de precios relativos, que a su vez se reflejan en desajustes fiscales, es posible que la economía se reencauce en la buena dirección y volvamos a tener una economía con estabilidad y con crecimiento sostenido. Pero hay que tener conciencia de que no es fácil lograr esto”.