Esta tarde a las 16 horas, Diego León Barreto visita a Rogelio Frigerio. El Intendente de Funes se reune con el Ministro del Interior de la Nación llevando una agenda de trabajo concreto: obras para la ciudad del Oeste.
Buena parte de los pedidos tienen que ver con la conectividad de uno de los municipios de mayor crecimiento a nivel nacional. Funes, junto a San Martín de los Andes, son las urbes de mayor desarrollo en los últimos años. Su crecimiento demográfico demanda mejores accesos y conexión con el área metropolitana. Si bien las obras son competencia de la cartera de Guillermo Dietrich –Transporte-, León Barreto sabe que Interior es el articulador de la fuerte demanda de una obra pública paralizada en la última década.
La iluminación de la Autopista Rosario-Córdoba en el tramo Rosario – Roldán, la mejora del nudo de acceso a la ciudad y la pavimentación de sus colectoras forman parte de un listado de obras prioritarias.
Con solo el 5% del servicio de cloacas, el intendente de Funes explorará con Frigerio subsidios para esa red más la de agua potable.
Días pasados otro requerimiento también llegó a las dependencias de Asuntos Municipales del Ministerio del Interior. Ocurre que la actual administración encontró “tierra arrasada” en todas las áreas municipales: computadoras obsoletas, equipamiento de mantenimiento de espacios públicos fuera de servicio, luminarias rotas y rodados en malas condiciones, son parte del deplorable patrimonio municipal con el que la gestión entrante debe afrontar el trimestre de mayor demanda de servicios con una población que se triplica.
El pie en Buenos Aires será una constante en la Administración de León Barreto; el intendente del PRO sabe que más allá del mejoramiento en la eficiencia del gasto público municipal, la ciudad demanda obras que vendrán de la mano de la provincia pero fundamentalmente del gobierno nacional.