Los contextos de la economía tienen una incidencia directa en las intención de compra y venta de inmuebles. Pese a ello, según datos estadísticos recientes del Colegio de Escribanos de Rosario, el 2022 fue el mejor de los últimos 4 años en cantidades de escrituras realizadas. Esto implica que pese a las devaluaciones constantes del dólar y con una inflación que casi llega al 100% interanual se llevaron a cabo un 9,6% más de escrituras de compraventa que en 2019 (pre pandemia).
Tratar de interpretar lo que moviliza dicho aumento en la voluntad de compra puede tener varios factores. Uno de ellos es la baja del valor en los inmuebles, donde si bien la misma no es uniforme a todas las zonas y tipologías, en la actualidad se registran en comparación con el mismo 2019, una retracción en los valores de un 30 a un 40%.
Asimismo, el 2023 puede ser una ventana de oportunidad para transformar aquellos dólares ahorrados y guardados bajo el colchón en un activo real, porque el piso en la baja de los valores tocó fondo, el costo de construcción viene aumentando en dólares billetes de forma constante. En términos reales, el RIPTE que es la remuneración imponible promedio de los trabajadores estables, está en mínimos históricos y cuando esta tendencia se revierta aumentará el poder adquisitivo ampliando también la demanda de inmuebles, pudiendo además impactar a futuro en el valor de oferta. Otro de los factores es también la falta de alternativas reales de inversión con la alta inflación existente tanto en dólares como en pesos.
Pasado el furor de los bonos, criptomonedas y con un dólar billete bajo el colchón que se devalúa a niveles internacionales con la pérdida de poder adquisitivo real, en Argentina hoy es un buen momento para comprar un inmueble. La falta de crédito hipotecario es el gran ausente y a la vez confirma la necesidad de los mismos para acceder a la casa propia. Las estadísticas lo demuestran y confirman que cuando en 2018 la gente accedía a un crédito para la compra de una vivienda se generaron un 35% más de ventas que en 2022. La necesidad de que regrese algún mecanismo de crédito ajustado al salario es fundamental para que la gente vuelva a tener acceso al crédito o a la construcción de una vivienda.
“Desde el sector venimos notando en las últimas semanas, que los valores de las propiedades han tocado su piso y que más no pueden bajar, o difícilmente lo hagan. Cuando analizamos los valores en oferta, estamos cada vez más convencidos que estamos en un piso histórico, sobre todo si se tiene en cuenta que para los argentinos los ladrillos funcionan como refugio de valor. Y lo único que podría desestabilizarlos es una brusca devaluación”, afirma Alejandro Bassini, coordinador área de Estadística del COCIR.
La enorme cantidad de oferta de unidades a la venta, sumadas a la falta de líneas hipotecarias y comparando con otras alternativas de inversión, ubica al ladrillo nuevamente en el lugar más seguro, accesible y rentable para aquellos que tienen la disposición de recursos en dólares.
“Si trazamos una línea de tiempo de los últimos 5 años partiendo de abril del 2018 cuando el dólar pasó de $20 a $40 y ponemos el foco en los grandes saltos cambiarios, vamos a ver los primeros grandes retrocesos de valores en dólares de las propiedades ofrecidas a la venta. El acomodamiento de los inmuebles fue de un 30% promedio”, contextualizó Bassini y agregó: “Los resultados políticos del cambio de gobierno del 2019, el salto abrupto del dólar blue y la llegada posterior del cepo cambiario agudizaron la merma de los valores en la plaza inmobiliaria. En esta ocasión la nueva baja fue de otro porcentual. Avanzando rápidamente en el tiempo a mitad del 2022, cuando la divisa superó los $300, notamos el último gran impacto de baja en dólares de las cifras de los inmuebles. Al día de la fecha, y con un dólar que asoma los $380 vemos que los pisos históricos ya están marcados. Cuándo se debería tener una caída de más del 15 % la realidad es que eso no sucedió”.
El buscador de propiedades de Rosario y la región deja datos muy interesantes que pueden consultar potenciales inversores. “Hoy vemos que los registros más bajos en dólares llegaron a su mínimo, y ello revalida que aquellos que tienen o quieren invertir en el mercado inmobiliario, se encuentran delante de su mejor momento. Si ingresamos al buscador de Propia.com.ar podemos constatar que no ha habido cambios significativos en los valores de oferta en sus más de 62.000 inmuebles ofrecidos a la venta”, puntualizó Bassini.
Por último, la autoridad del COCIR destacó el valor estadístico y social que aportarán los resultados del Censo 2022. “En menos de 15 días vamos a tener registros muy importantes que nos aportará una información muy valiosa para saber mejor dónde estamos parados y hacia dónde tenemos que dirigirnos. Los resultados del Censo serán vitales para seguir contando con información oficial estadística y de calidad que nos ayude a interpretar la realidad del sector inmobiliario”.
Por C.I. Diego Ferreyra