En el afán de crear más impuestos sobre sectores de la economía del país, ahora la AFIP anunció que irá por las plataformas digitales, las que serán gravadas con hasta un 8% de IVA cuando la facturación supere los $ 200.000 mensuales, es decir, U$S 565 (según cotización del dólar MEP al viernes pasado).
“Es una barbaridad que siempre tengan que seguir metiendo regímenes tributarios”, manifestó el tributarista rosarino, Enrique Lingua, titular de Estudio Lingua, quien agregó que “En una Argentina de 100% inflación anual, ponen 200 mil pesos hoy y en marzo ya son 150.000, por lo que cada vez achican más el margen y terminan gravando cifras insignificantes y afectando a un grupo grande de personas que movilizan la economía”, sostuvo.
Así, de acuerdo con Lingua, esta disposición no hará otra cosa que sobrecargar producto final a consumir: “Quien va a sufrir esta retención lo va a trasladar al precio de venta de un producto final, como todo impuesto al consumo”, indicó.
La Resolución de la AFIP señala que “habiéndose detectado nuevas modalidades de evasión, resulta necesario realizar modificaciones al régimen, a fin de intensificar los controles sobre las operaciones efectuadas mediante portales o aplicaciones web, adecuando las alícuotas que desalienten tales conductas disvaliosas, incorporando nuevos agentes de percepción y ampliando las operaciones alcanzadas”.
Para Lingua, si este impuesto encarece y hace más engorroso el sistema de compra-venta digital, “la gente se va a ir y obviamente se operará más de manera informal”.
En la misma sintonía opinó Guillermo Roca, director de Quakmedia, empresa especializada en marketing digital: “Con esta medida, como siempre, pierde la mayoría de la gente, porque, como excusa de querer controlar algo o a algunos que se pasan de vivos, la terminamos pagando todos”, expresó, por su parte.
Roca indicó que el e-commerce es un sector que “está en pleno crecimiento”, más aún después de la pandemia y las sucesivas cuarentenas, por lo que consideró que que “la repercusión va a estar al principio, porque después nos vamos a malacostrumbrar a un impuesto más, lamentablemente”. A su vez, y al igual que Lingua, enfatizó que este gravamen “lo van a terminar pagando los consumidores finales y los empleados de las plataformas”.
REDACCIÓN ON24
