La vida comercial de calle Mendoza comenzó este año a recibir más cantidad de propuestas gastronómicas fundamentalmente entre Iriondo y Francia, poblando así el corredor en esas cuatro cuadras con pizzerías, heladerías, vinerías y sangucherías como algunos de los nuevos negocios que cortaron cintas en pocos meses.
“Históricamente, moría en Cafferata (viniendo de Avellaneda) y no era muy gastronómico”, pero “hoy en día, se está corriendo más hacia Francia con muchos comercios nuevos”, señaló a ON24 Jorge Antonio Pérez, que hace dos semanas abrió la vinería Valentín Giménez en Mendoza 3380.
El fenómeno puede responder a varios factores, que operadores inmobiliarios de la ciudad explicaron a este medio. Por un lado, el incremento de las residencias en Mendoza y Francia, corriendo, de esta manera, la habitacionalidad de la ciudad desde Oroño y el Centro hacia el oeste.
“Francia se incorporó como un bulevar céntrico. Antes, se caracterizaba por tener edificios para estudiantes y ahora ha sumado muy buena calidad constructiva con unidades de dos y tres dormitorios; también en Mendoza y, en menor medida, San Juan. Y los locales gastronómicos están atados a esa ocupación de residencias”, indicó José Ellena, de Ellena Negocios Inmobiliarios. “Al tener 30 metros de altura y construirse más superficie, también tiene una densidad poblacional que termina consumiendo en todo este radio”, destacó, en tanto, Andrés Gariboldi, de Dunod Propiedades.
El también presidente del Colegio de Corredores Inmobiliarios de Rosario sumó que “las cuestiones de movilidad y de estacionamiento también “hacen que termines consumiendo hoy en el mismo barrio” y agregó que “pasa algo similar en San Martín al 5000 y en Empalme”.
Es decir que otra de las causas es la fuerte tendencia a transitar y consumir dentro de los centros comerciales próximos, siendo quizá uno de los efectos que consolidó la pandemia y las cuarentenas. “Eso se ve en Echesortu, pero también en Fisherton, en Alberdi, en Tiro Suizo, con todo tipo de negocios que se repiten en esas zonas porque hay demanda y eso, a su vez, eleva el nivel de la oferta comercial”, complementó Ellena. “Son modelos de negocios que justamente sirven para este tipo de centros comerciales”, subrayó.
De hecho, otra de las propuestas que llegó a la zona, aunque en la esquina de Mendoza y Avellaneda, fue el desembarco de la Asociación de Empleados de Comercio de Rosario, que alquiló el local de 350 m2 en la esquina de ambas arterias, tras el cierre del negocio gastronómico Roma, a mediados de 2020, en plena crisis sanitaria. La institución gremial prevé brindar servicios de desayunos y almuerzos, “evidentemente porque notan que tiene un número de afiliados interesantes en la zona”, destacó el presidente de Dunod, inmobiliaria que cerró el contrato de alquiler con la Asociación.
Por otra parte, Gariboldi resaltó que Echesortu “siempre ha sido un sector con baja vacancia en locales comerciales”, a lo que Ellena añadió: “Desde Avellaneda hasta Iriondo o San Nicolás, no hay muchos locales disponibles, pero si los hubiera, se alquilarían rápido”. Este punto también puede estar impulsando que la oferta comercial se expanda hacia Avenida Francia, donde otro tipo de negocios, como las mueblerías, también cobran especial protagonismo.
Así, ante una demanda que va en aumento por desembarcar en este corredor, el valor locativo también muestra signos de incremento: “Estamos hablando de números para renovar el alquiler iguales o mejores que calles del microcentro”, porque, salvo el Paseo del Siglo o peatonales, locaciones como Mitre y San Juan o San Lorenzo y Mitre, por ejemplo, “hoy no son muy demandadas”, explicó Ellena.
REDACCIÓN ON24
