Es un período convulsionado en términos políticos, en el que todos los sectores van delineando su preferencia por una u otra alternativa. Luis Etchevehere, presidente de la Sociedad Rural Argentina dejó en clara su posición al respecto ante Marcelo Fernández, en su programa Con Sentido Común, de Fisherton CNN. “Hace desde el año 2008 que el gobierno no recibe a ningún representante de productores”, se quejó.
Etchevehere afirmó que “el productor agropecuario nunca acompañó a este modelo, desde que en el 2005 y 2006 Néstor Kirchner y Daniel Scioli cerraron las exportaciones de carne”, por eso fueron denominados desestabilizadores y golpistas. Mientras tanto la ruralidad, es decir los comercios y trabajadores que dependen económicamente del campo, sí se mostraron en buena medida a su favor especialmente en el 2011. “Sin embargo, vieron cómo el ataque que el gobierno venía haciendo al campo en venganza por lo sucedido en 2008, no solamente perjudicaba a los productores, sino a todos esos pueblos que viven económicamente de la actividad agropecuaria y agroindustrial”, afirmó.
Según explicó, los productores están buscando un gobierno más previsible y que haya establecido con claridad cuáles serán las reglas de juego luego de asumir. “Tanto Cambiemos como UNA y el Frente Progresista pusieron por escrito, con mucho nivel de detalle, su propuesta para el campo”, aseguró. En cambio, el FPV lleva siete años sin querer establecer un diálogo: “Nunca nos contestaron los pedidos de reunión”.
Los productores reclaman una moneda estable, sincerar el precio del dólar, un sistema impositivo que incentive a invertir y que no hayan restricciones para la exportación. Del mismo modo, exigen un gobierno que mejore el diálogo ya que, según considera, “es impensable que sector público y privado no trabajen codo a codo para lograr los objetivos”.
Su descargo final fue lapidario: “Nos robaron doce años de nuestra vida y de nuestra actividad productiva. El Gobierno fue ladrón y culpable de haber llevado adelante políticas que arruinaron a 95000 productores que abandonaron su actividad en estos últimos años”.