Aquel comentario de que “vamos camino a Venezuela” parece no estar tan lejos. Al menos en algunos sectores de la actividad donde ya empezó a flaquear la oferta de productos. Uno de ellos es la industria automotriz, que sufre desde hace meses la escasez de modelos cero kilómetro para abastecer a los concesionarios, pero también la falta de repuestos para sus talleres y servicios de post venta.
“Tenemos autos parados porque no están las piezas”, afirmó a ON24 el gerente general de Circular S.A., Gustavo Gho, empresa que posee un taller de chapería en Funes, en el que realizan las reparaciones que son aprobadas por las aseguradoras. “Hoy, si vas al galpón, parece un desarmadero de autos que tuvieron un siniestro, el cliente aceptó la aprobación de la compañía de seguros, pero estamos esperando a que lleguen las piezas”, indicó.
Tanto Gho como el gerente comercial de Chevromax, Alejandro Farragut, coincidieron en que las demoras para hacerse de las piezas necesarias alcanzan los tres meses. “Hay faltantes puntuales de partes que no son de alta rotación y quizá tardan 60 o 90 días”, señaló el ejecutivo de Chevrolet, a lo que su colega de Circular agregó que esta situación es más complicada aún en autos que llegan del exterior. “Lo estamos sufriendo fundamentalmente en el caso de chapería, que atrasa las reparaciones”, manifestó Gho, quien agregó que también escasean los neumáticos.
En la misma sintonía, Sergio Jure, de la empresa Jure Accesorios y Autopartes, remarcó que hay muchos problemas porque “la mayoría de la producción nacional tiene insumos importados” y ejemplificó: “Los faros traseros para camiones son de LED y no se consiguen las LED, que vienen desde China. Entonces, se frena la producción de faros. También hay quejas de que no se consigue plástico para fabricar guardabarros”.
En ese sentido, Jure coincidió con Gho y Farragut en cuanto al tiempo de demora, aunque apuntó que las entregas de algunas fábricas llegan hasta los 120 días.
“Nosotros también vendemos mucha climatización para vehículos y no se consiguen los compresores, los calefactores ni los aires acondicionado. Estamos tratando de hacer stock para el verano, pero no hay, porque no les permiten a los importadores el cupo para traer la cantidad suficiente”, explicó.
Sobre este punto, Farragut amplió: “En la industria, antes había un poco más de disponibilidad de stock o más facilidad para liberar piezas. Hoy, con las SIMI (Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones), tenés que tener cupos para liberarlas, por lo que se complica un poco más, porque las autorizaciones salen el 15 del mes y si no entraste ahí, tenés que liberar al mes siguiente estableciendo tus prioridades”.
El ejecutivo de Chevromax consideró que, en el caso de la marca que representa, las piezas del “primer golpe” (sean ópticas, paragolpes, radiadores) “están prácticamente disponibles”, aunque otras de mayor sofisticación como cajas de dirección, display del aire acondicionado o determinadas medidas de neumáticos “tardan más” en llegar.
Así, para Gho, “se generan situaciones complejas porque se cotiza la reparación a un determinado precio pero la compañía de seguros la paga cuando se termina el trabajo; entonces, ahora separamos y cotizamos la mano de obra por un lado y los repuestos por otro. Es el ingenio para no perder plata”, sostuvo. Incluso, contó que este año ha ocurrido que muchos autos “queden viejos en el puerto porque el gobierno no libera los dólares para nacionalizar el vehículo”.
A modo de síntesis, Jure observó: “Hay demanda pero el problema es que no hay materia prima y eso regula, muchas veces, el precio al alza, porque tampoco saben a qué precio va a poder reponer”.
REDACCIÓN ON24
