Si se publicara en los diarios que un meteorito va a destruir la Tierra en cualquier momento; si cientos de volcanes hicieran erupción en simultáneo y nos taparan de lava la 9 de Julio; si la economía mundial colapsara de un día para el otro. Aun así, y pese a todo, Punta del Este estaría siempre repleto de argentinos del 1° al 15 de enero. Pasa todos los veranos: se anuncia una temporada malísima, se avisa que los alquileres vienen en picada y se arguyen razones de todo calibre: dólar blue detonado, elecciones aquí y allá, crisis financiera internacional. Pero, a la altura de la Navidad, las playas repletas se encargan de desmentir todo porque, de un modo u otro, el público fiel a Punta siempre se las ingenia para terminar mateando en La Mansa.
A menos de dos meses del comienzo del show estival, las novedades son que, según las inmobiliarias consultadas por LA NACION, el 100% de los alquileres se está concretando con tarjeta de crédito. “Como nunca, los argentinos adelantaron el pago por temor a que el dólar-tarjeta, que hoy ronda los 7 pesos, se dispare”, explican.
Exactamente un año atrás, cuando se proyectaba el verano 2012/2013 y el hoy famoso dólar blue andaba de estreno, los pronósticos auguraban una caída del 50% en los alquileres y un verano a persiana baja en el balneario más chic de América del Sur. Pero, pese a que hubo una baja sensible en la cantidad de visitantes, lo cierto es que nada fue tan desastroso como se preveía. “Lo que sucede ahora es que hay menos incertidumbre y eso es clave para que la temporada sea buena: el dólar está asumido y el resultado de las elecciones en la Argentina era esperable, con lo cual la gente ahora puede proyectar mejor sus vacaciones”, entiende Juan Irala y Hernández, broker de RE/MAX.
La misma cuota de optimismo aporta Andrés Jafif, presidente de la Asociación de Inmobiliarias de Punta del Este (Adipe). “Ya no hay temporadas malas: si no viene el inquilino viene el propietario”, sentencia, y dice que, aunque las operaciones de alquiler marchan a ritmo lento, es imposible estimar si hay una merma con respecto al año pasado.
También ocurre que, durante la última década, se han construido más de 500.000 metros cuadrados en Punta del Este, en decenas de gigantescas torres que taponan el cielo del balneario, con lo cual la oferta alquilable es enorme. Lo que sí puede confirmar Jafif es que el segmento que más se movió hasta el momento es el de propiedades que cuestan entre 5000 y 15.000 dólares la quincena, en zonas como José Ignacio, Solanas y Portezuelo.
En tanto, el segmento más rezagado (que padece las restricciones cambiarias con toda su fuerza) es la clase media, que hasta hace unos años solía ocupar departamentos de entre 2000 y 3000 dólares la quincena. “Es hora de que tanto los intermediarios como los propietarios seamos flexibles y creativos para permitir que las operaciones se realicen”, advierte Florencia Sader, de la tradicional inmobiliaria Sader, mientras que Nana Lavagna, empresaria del sector, agrega: “Los valores de los alquileres no se modificaron con respecto al año anterior”.
Tanto inmobiliarias como operadores turísticos y dueños de hoteles coinciden en que éste será el verano de la tarjeta y de los pesos argentinos. No sólo la totalidad de los contratos de alquiler se están concretando con plástico, sino que los complejos vacacionales, como el Solanas Vacation Club, también anunciaron que aceptarán pesos argentinos. Hasta los supermercados uruguayos están vendiendo una gift card en estos días, que se podrá hacer efectiva durante las vacaciones. “Queremos congelar los gastos en comida para que el turista se pueda cubrir de un eventual aumento del 20% que aplica la AFIP para compras con tarjeta en el exterior”, comenta a LA NACION un alto directivo de una de las cadenas involucradas. El proyecto no viene mal, sobre todo si se piensa que llenar un changuito hoy en Punta del Este cuesta unos US$ 200, que al dólar-tarjeta serían unos 1400 pesos argentinos.
IVA Y RESTAURANTES
Hay que recordar que sigue rigiendo en Uruguay la devolución del IVA, que aquí es del 22% y se aplica tanto a la gastronomía como a hoteles y hospedajes, además del 10,5% que se reintegra en los pagos con tarjeta de débito o crédito para los alquileres temporales en inmobiliarias registradas. Gracias a estas medidas del gobierno uruguayo, los restaurantes, por ejemplo, ganaron un poco de competitividad.
“Hay que pensar que, con una devolución del 22%, sobre cuatro comensales hay uno que no paga. Usando la tarjeta abonás un precio en pesos argentinos que se acerca bastante a lo que cuesta cenar en un sitio de primer nivel en Buenos Aires”, afirman los dueños de Guappa, un conocido restaurante de la zona del puerto.
Parecería que ni el dólar blue ni las crisis de todos los años ponen realmente en jaque el inicio de la temporada. Eso sí, mejor no olvidarse la tarjeta (y, por si acaso, acordarse de subirle el tope).
DATOS ÚTILES
- Los precios
Valores expresados en pesos argentinos
Buquebus a Montevideo con bodega: 5445. Tarifa Web de ida y vuelta, con bodega, en servicio rápido para una familia de cuatro personas (dos adultos, dos menores), durante la primera quincena de enero. Incluye Resolución AFIP 3450
Llenar el tanque: 650
Peaje: 14
Comer un chivito: 110
Parrillada para dos en Maldonado: 200
Cena para cuatro con vino en el puerto: 600
Llenar el changuito del súper: 1400; un kilo de helado: 125; un café: 15; una gaseosa: 18
Ir al cine: 53
- Alquileres y hotelería
Valores expresados en dólares
Depto un dormitorio, primera quincena de enero, desde 2200; segunda quincena , desde 1800
Depto dos dormitorios, primera quincena enero: desde 3100; segunda quincena, desde 2500.
Casa en San Rafael (primera quincena enero): desde 10.000
Hotel dos estrellas (base doble/noche): 90-120
Hotel tres estrellas (base doble/noche): 120-200
Hotel cuatro estrellas (base doble/noche): 200-300
Hotel cinco estrellas (base doble/noche): desde 500.
Fuente: Diario La Nación
