En el marco del stand del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, el INTA presentará un recorrido que va desde la siembra al agregado de valor, con énfasis en el manejo de cultivos (como cultivos de cobertura, fertilización, agricultura de precisión, las Ag Tech, el riego por goteo subterráneo y la tecnología de aplicación variable), el manejo de los efluentes y las bioenergías, la ganadería de precisión, pasturas y el valor agregado en trigo, soja y legumbres. La mayor muestra agroindustrial a cielo abierto se realizará del 8 al 11 de marzo en San Nicolás –Buenos Aires–.
Durante los cuatro días de la muestra, el Ministerio de Agricultura buscará exponer los programas y herramientas que tienen como objetivo el desarrollo de las materias primas, en función de incrementar el agregado de valor, la generación de mano de obra y el desarrollo en el territorio. En este sentido, el INTA pondrá el foco en las ventajas de las AgTech aplicadas a todos los sectores productivos y agroalimentarios.
“La agricultura de precisión incorpora a todas las tecnologías ligadas al sistema agropecuario desde monitores e imágenes satelitales que facilitan la toma de decisiones, hasta los equipamientos aplicados en la maquinaria agrícola mejorando el automatismo y la eficiencia”, señaló Fernando Scaramuzza, coordinador del Proyecto Agricultura de Precisión y Mecanización Agrícola del INTA.
En este sentido, Scaramuzza destacó la importancia de la incorporación de diferentes tecnologías precisas y de la mayor digitalización, debido a que permite aumentar la producción además de permitir trazabilidad de procesos y certificaciones de productos.
“Conceptos como Big Data, Ag Tech, Machine Learning, Inteligencia Artificial, Algoritmos, Blockchain, app y plataformas, son nuevas terminologías que vienen a potenciar la ya conocida Agricultura de Precisión”, indicó el especialista en Agricultura de Precisión del INTA quien reconoció que la incorporación de AgTech al sistema ayuda a mejorar la eficiencia de diferentes actividades, como los motores eléctricos en siembra, los sensores ópticos para la aplicación selectiva sobre malezas, la utilización de drones y diferentes sensores que ayudan a caracterizar los ambientes dentro de los lotes o los cultivos ya establecidos y en estadios avanzados. “Mediante una breve encuesta, estaremos consultando a los productores sobre las diferentes necesidades que tienen frente a esta nueva agricultura digital”, agregó.
Por otro lado, los cultivos de cobertura serán también abordados como una temática destacada en esta muestra agroindustrial, debido a que “permiten reducir un 40 % las pérdidas de agua por escurrimientos superficiales y un 80 % las pérdidas de suelo, dando paso así a la fertilidad y humedad, requisitos para mantener la producción”, expresó Julia Capurro, especialista en cultivos y jefa de la Agencia de Extensión Rural Cañada de Gómez del INTA.
“Durante su crecimiento invernal y después de su secado en primavera y verano, los cultivos de cobertura generan una alta competencia por luz, agua y nutrientes, con las semillas de malezas presentes en los lotes”, indicó Capurro. De esta manera, produce una significativa mejora en la capacidad de almacenar el agua de precipitaciones.
En cuanto a tecnologías de riego por goteo subterráneo, Aquiles Salinas –especialista en tecnologías de riego y director del INTA Manfredi, Córdoba– destacó que “es un sistema que se destaca por su alta eficiencia de aplicación de agua y fertilizantes, esto sucede por debajo de la superficie del suelo directamente a la raíz del cultivo, evitando las pérdidas por evaporación, deriva y escurrimiento”.
Frente a una situación ambiental regida por una gran variabilidad en las precipitaciones en las diferentes regiones de nuestro país, “este mecanismo de riego permite estabilizar la producción e incrementar los rendimientos”, señaló Salinas.
Del mismo modo, el especialista agregó: “La tecnología de aplicación variable en equipos de pivote central, permiten dosificar el agua y los insumos de acuerdo a los distintos ambientes del lote, logrando potenciar la productividad de los ambientes con el ahorro de agua, insumos y energía”.
En relación a esto, el INTA presenta la bioenergía como una herramienta indiscutida para mitigar el cambio climático y generar valor agregado mejorando la calidad de vida en los territorios. En esta línea, José María Méndez –especialista del INTA en Totoras, Santa Fe– señaló: “Son una pieza fundamental en un sistema de economía circular en procesos de agregado de valor, de la misma manera que permiten transformar pasivos ambientales en activos económicos”.
Asimismo, la implementación de buenas prácticas en la gestión de efluentes y residuos sólidos pecuarios incrementa la sustentabilidad de los sistemas productivos y evita riesgos de impacto negativos sobre el ambiente. De esta manea es que el INTA trabaja en el desarrollo de equipamiento mezclador de compost.
La ganadería de precisión y el valor agregado en trigo, soja y legumbres son otras temáticas puestas a disposición a los grupos productores como soluciones innovadoras y sustentables. “En la Argentina, la ganadería continúa un proceso de mayor profesionalización para ganar eficiencia y competitividad. Por lo que desde las innovaciones tecnológicas buscamos aportar valor a esta actividad”, señaló Ricardo Garro, coordinador del Proyecto de Ganadería de Precisión del INTA.
En tal sentido, la investigación y la trasferencia de buenas prácticas de siembra y manejo de pasturas son indispensables para alcanzar su eficiencia en la utilización de las mismas y posterior transformación en carne o leche. Los comederos inteligentes emergen como una destacada innovación en la ganadería de precisión asociada al monitoreo del consumo animal. Todas tecnologías para acompañar la evolución y el desarrollo de la ganadería, a través de la recolección de la información, la automatización y la robotización para la mayor eficiencia.
Por último, el valor agregado en trigo, soja y legumbres sobresale frente a las nuevas tendencias de consumo que “plantean una creciente incorporación de proteínas vegetales a las dietas, proponiendo un esquema de productos basados en plantas, una alternativa que permite complementar las deficiencias nutritivas de la alimentación”, explicó Cecilia Accoroni –especialista del INTA en Totoras, Santa Fe– y agregó que permiten el acceso a alimentos a un costo inferior que las proteínas animales.
A nivel nacional, las arvejas son la segunda alternativa de fuente proteica después de la soja. “Es por esto que, desde el INTA, se trabaja en alcanzar una mayor eficiencia en sus cadenas de valor; mejorando el contenido proteico de la semilla con el fin de aumentar los rendimientos de producción de productos proteicos tales como texturizados, concentrados y aislados”, señaló Alejandro Saavedra, especialista del INTA, quien indicó que, además de estos aspectos, los visitantes también podrán conocer de primera mano cuáles son los temas en los que el Instituto trabaja junto con el sector privado en diferentes procesos y en mejoramiento genético, como el del cultivo de sojas especiales no OGM con diferentes atributos para proveer al sector Pyme industrializador que demanda desarrollos para nuevos consumos y diferentes mercados.
Fuente: INTA