El informe de CICCRA dice que durante el primer mes del año el nivel de actividad de la industria frigorífica vacuna continuó siendo bajo, producto de la escasez de hacienda para enviar a faena que se viene observando en el último año. Por un lado, influyó la menor zafra de terneros, a raíz de la liquidación de vientres que se verificó entre las primaveras de 2018 y 2020.
En enero de 2022 se faenaron 971,8 mil cabezas de hacienda vacuna. La comparación interanual arrojó una baja de sólo 2,6% (-26,2 mil cabezas), debido a que la actividad de enero de 2021 también había sido baja.
La participación de las hembras en la faena total subiera levemente entre los últimos dos eneros, hasta quedar en 44,9%.
La producción de carne vacuna fue de 222,3 mil toneladas res con hueso (tn r/c/h) en el primer mes del año. En términos interanuales la baja fue de 2,5%.
Si el total exportado ascendió a 65,0 mil tn r/c/h equivalentes en el inicio del año (-6,2% con relación a enero de 2021; -4,3 mil tn r/c/h), entonces se enviaron al mercado interno 157,3 mil tn r/c/h de carne vacuna. Es decir, casi 1,0% menos que en enero del año pasado (-1,4 mil tn r/c/h).
En lo que respecta al consumo aparente de carne vacuna por habitante, en enero de 2022 fue de 47,4 kg/año (tomando el promedio de los últimos doce meses) y resultó 3,5% inferior al promedio de un año atrás (-1,7 kg/hab/año).
En tanto, el consumo aparente de carne vacuna correspondiente a enero se ubicó en 40,8 kg/hab/año, teniendo en cuenta la faena y los números provisorios de exportaciones, un volumen 1,8% menor al de enero de 2021.
