Según la secretaría de Energía, las tarifas de los servicios de energía eléctrica y gas tendrán un incremento de entre 17 y 20% para todo el año 2022.
El aumento se pondrá en marcha durante los dos primeros meses del año. Así, la recomposición se hará de una única vez, mientras que la segmentación que podría incrementar el precio de la energía para esos usuarios en particular (por una magnitud bastante mayor a la anunciada) podría ser gradual en su implementación a lo largo del año.
De este modo, el Gobierno se asegura que la suba de tarifas decidida sea menor a los incrementos de salarios proyectados para el 2022. “A diferencia de lo ocurrido en 2020 y 2021 donde la pandemia afectó de forma significativa el poder adquisitivo de las familias argentinas y donde, en gran medida, fue el estado nacional el que afrontó el costo incremental de la energía mediante subsidios, en 2022 habrá una actualización en el precio de la energía mediante una recomposición de las tarifas con la finalidad de quitarle presión al sector público y equilibrar el escenario fiscal”, señalaron desde Energía.
El incremento tarifario tendrá, a la vez, su complementación mediante un módulo de segmentación para aquellos hogares que puedan pagar la tarifa plena. Desde comienzos de 2021, el Gobierno había anunciado que se venía trabajando en una “segmentación de tarifas”, por la cual los aumentos serían aplicados de acuerdo a la capacidad económica de cada usuario.
En las últimas semanas, tanto el secretario de Energía, Darío Martínez, como el subsecretario de Energía Eléctrica, Federico Basualdo, firmaron numerosos acuerdos con la finalidad de que cooperativas eléctricas y distribuidoras de distintas zonas del país pudiesen regularizar sus obligaciones de pago con la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (CAMMESA) en el marco de los previsto en el artículo 87 de la Ley de Presupuesto.
Cabe recordar que el ministerio de Economía había realizado aclaraciones sobre la posibilidad de un aumento de tarifas de servicios públicos como luz y gas, a raíz de lo que marcaba el Presupuesto 2022 en esa área. En ese sentido, el proyecto de la “ley de leyes” había estimado que los subsidios a las tarifas de servicios públicos alcanzarán al 1,8% del PBI, pero que este porcentaje podría reducirse en un 0,3%, una vez que se implemente un esquema de segmentación de subsidios de acuerdo a los ingresos. Es decir, que en principio esa reducción de subsidios se cubriría con aumento de tarifas, algo que tendrá lugar en el arranque del 2022.